GRAND RAPIDS, MICHIGAN (EVH). Familiares de un madre soltera de 33 años de edad, quien se encuentra detenida con miras a ser deportada a su natal México, piden a las autoridades migratorias a ser justos y atender las consecuencias que traería la deportación para Guillermina Carrera y sus dos hijos de 16 y 8 años de edad.
GRAND RAPIDS, MICHIGAN (EVH). Familiares de un madre soltera de 33 años de edad, quien se encuentra detenida con miras a ser deportada a su natal México, piden a las autoridades migratorias a ser justos y atender las consecuencias que traería la deportación para Guillermina Carrera y sus dos hijos de 16 y 8 años de edad.
Cuando fue detenida por agentes del ICE hace unas tres semanas por no poseer documentación, la joven se encontraba en una cita con su oficial de probatoria en una oficina pública, a donde acudía temporalmente tras incurrir hace un largo tiempo en un delito menor por el que ya había cumplido con 100 horas como voluntaria en la comunidad, multas y citas periódicas.
Carrera llegó como indocumentada a los Estados Unidos a los 8 años de edad, motivo por el cual conoce muy poco de su país natal, pues ha vivido casi toda la vida en este país, eso explicó María Rosario tía de Guillermina.
“Su vida, sus sueños, sus hijos todo están aquí”, comentó Rosario, a quien en una llamada telefónica la joven manifestó “Yo no me quiero ir, aquí esta mi vida” le exclamó Carrera.
Igual que muchos de los inmigrantes indocumentados, a Guillermina le ha tocado una vida difícil, sin poder realizar sus dos grandes sueños: estudiar y legalizar su estatus migratorio.
“A mi sobrina le toco una vida dura en la que ha vivido violencia domestica, depresiones, hasta llegar a ser señalada por los demás sin ser una criminal ni nada de eso, lo único que quiere es superarse y sacar adelante a sus hijos” dijo Rosario.
Guillermina termino el bachillerato en una escuela para adultos, y a los 17 años tuvo su primer hijo, desde entonces ha trabajado bastante para criarlos, siendo una madre responsable para ellos, así explicaron sus familiares quienes desde la detención de la joven han vivido una pesadilla.
Con relación a eso Rosario expresó “nosotros tememos que ella recaiga en una depresión e intente nuevamente hacerse daño así misma, por eso esperamos que los jueces sean prudentes con este caso”, “ serian tres vidas perdidas si la mandan de regreso a México, pues van a destinar a esos niños a vivir a su suerte sin su madre”.
Desde hace un año Guillermina acudía a la iglesia cristiana “Camino de la Verdad” asistida por el pastor Eleasar Alonzo. Además cumplía a cabalidad todo lo que la ley le demandaba.
El día 5 de mayo es el próximo juicio de Guillermina Carrera en la corte. Sus familiares desde el inicio del proceso han gastado unos 3 mil dólares que ayudaron a recolectar con actividades como venta de tamales y otras comidas.
El sábado 26 de abril estarán realizando ventas de productos, comida y rifas pro recaudación de fondos en la iglesia Camino de la Verdad, ubicada 739 de la Four Street en el North West, inicia desde las 12:00 hasta las 5:00 PM, todos los interesados en colaborar con la causa están invitados.
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